El día de San Valentín puede ser un poco odioso. Sobre todo si trabajas en un café. Pero un día como hoy, hace un año ya, solo que era martes, abrí este blog decidida a publicar mis cositas en algún lugar para no sentir que me inundaba de ellas y de esa manera ir drenándolas de mi vida, de mi entorno y de mi cabeza que de lo contrario viviría todo el tiempo a punto de explotar.


En realidad estoy bastante contenta porque este blog me a permitido valorar las cosas que escribo y creer en ellas. Creo que cualquiera puede aventurarse a abrir su pequeña caja de pandora y ver qué tiene adentro y ponerlo en papel o como sea que uno decida expresarse.

Bueno, ahora si, para quien quiera que siga este blog, prometo solemnemente cambiar de plantilla, no crean que esta no me llega, pero la niña no es tecnológica, que le vamos a hacer, asi que hasta que aprenda a cambiarla, me quedaré con esta color...el que ven.
Lo siguiente que verán en este blog será menos de lo mismo y más esquemas rotos. Espero, menos videos mios haciendo lo que se hacer mejor es decir: ser una tremenda ganzasa, pero no puedo prometer nada.